2011/06/22

epílogo de un viaje en andalucía


GACELA PRIMERA
DEL AMOR IMPREVISTO

Nadie comprendía el perfume
de la oscura magnolia de tu vientre.
Nadie sabía que martirizabas
un colibrí de amor entre los dientes.

Mil caballitos persas se dormían
en la plaza con luna de tu frente,
mientras que yo enlazaba cuatro noches
tu cintura, enemiga de la nieve.

Entre yeso y jazmines, tu mirada
era un pálido ramo de simientes.
Yo busqué, para darte, por mi pecho
las letras de marfil que dicen siempre.

Siempre, siempre: jardín de mi agonía,
tu cuerpo fugitivo para siempre,
la sangre de tus venas en mi boca,
tu boca ya sin luz para mi muerte.

[Federico García Lorca, «Diván Del Tamarit».]

2 comentários:

Javier disse...

Diván Del Tamarit es uno de los poemarios más desconocidos de Lorcay uno de los más bellos.

Gonçalo disse...

pe-jota, este maravilhoso primeiro poema marca bem o tom do livro, e cada vez que leio Lorca torna-se evidente a enorme influência que exerceu sobre vários poetas portugueses, nomeadamente (penso que é claro) o Al Berto.